Los meniscos se pueden desgarrar por un traumatismo agudo o por cambios degenerativos que ocurren con el tiempo. Entre los tipos de lesiones meniscales están:

DEGENERATIVAS: suelen ser por la edad o microtraumatismos que suceden a lo largo de los años. TRAUMÁTICAS: ocasionan desgarros o roturas, tras grandes torceduras (desgarros circunferenciales  y roturas longitudinales y transversales).

Los ligamentos cruzados son fuertes bandas de tejido que conectan el fémur con la tibia y que cruzan por el medio de la articulación y ayudan a estabilizar la rodilla.

La mayoría de las lesiones del ligamento cruzado ocurre al practicar deportes y hacer actividades físicas que pueden ejercer presión en la rodilla.

Factores de riesgo: sexo femenino, deportes de alto impacto, escaso acondicionamiento físico, calzado o equipo deportivo inadecuado o en mal estado, complicaciones.

La osteoporosis es una enfermedad crónica y progresiva que deteriora la estructura de los huesos, aumentando el riesgo de fracturas y sus complicaciones. Se considera una de las principales causas de hospitalización prolongada en mujeres mayores de 45 años, esta campaña centra su atención en prevenir, diagnosticar y tratar oportunamente la osteoporosis y las enfermedades óseas metabólicas a nivel mundial.

Es muy importante que la prevención de la osteoporosis comience desde la infancia mediante una alimentación balanceada rica en calcio, vitamina D, hábitos de vida saludable y actividad física continua.

La enfermedad del manguito rotador puede ser el resultado de una lesión importante en el hombro, o una degeneración progresiva o un desgaste del tejido del tendón.

La actividad repetitiva por encima de la cabeza o levantar objetos pesados durante un período de tiempo prolongado puede irritar o dañar el tendón. Algunos ejemplos son los pintores, los carpinteros y las personas que juegan al béisbol o al tenis.

Es una causa de adormecimiento en las manos causado por la compresión del nervio mediano. Frecuente en personas con actividades de oficina (uso de teclados, mouse, celular, tablets) y que realizan actividades con movimientos repetitivos de la mano y muñeca, Frecuente en pacientes diabéticos y con artritis reumatoide, Puede ocurrir después de un traumatismo o una fractura.

Su tratamiento inicial es con analgésicos, desinflamatorios, neuromodulador y terapia física así como retirar la actividad ligada al inicio de los síntomas.